La edad no es una razón para dejar de moverte o preocuparte por tu bienestar. Al contrario. Entre más hagas por tu mente y cuerpo, más lejos te llevarán. Y con más entusiasmo. Así que nunca creas que es tarde para comprometerte con la propia salud., ni consideres que hay pasos pequeños para lograrlo. Si algo no te ha funcionado, otra cosa para la que nunca es tarde es para intentar algo nuevo.